Pastel de Piña Casero — Una Delicia Tropical

Introducción

¡Hola, amantes de la repostería! Si buscas un postre jugoso, aromático y con ese toque tropical que alegra cualquier mesa, este pastel de piña es para ti. La mezcla del dulzor natural de la piña con un bizcocho tierno y un glaseado cremoso crea un equilibrio perfecto: ni demasiado pesado ni empalagoso. Es ideal para sobremesas familiares, meriendas o celebraciones improvisadas. Además, su preparación es sencilla y accesible, perfecta tanto para principiantes como para quienes ya disfrutan horneando.


Por qué te encantará esta receta

  • Fácil de preparar: pasos claros y sin técnicas complicadas.
  • Sabor auténtico: usamos piña natural para obtener un sabor fresco y vibrante.
  • Textura jugosa: el buttermilk (suero de leche) y la piña mantienen el bizcocho húmedo por días.
  • Versátil: puedes servirlo solo, con crema batida o con un toque de coco rallado.

Ingredientes (para 8 porciones)

Para el pastel

  • 2 tazas (250 g) de harina de trigo
  • 1 1/2 tazas (300 g) de azúcar granulada
  • 1 cucharadita de bicarbonato de sodio
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 1/2 taza (115 g) de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
  • 3 huevos grandes, a temperatura ambiente
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 1 taza (225 g) de piña triturada, bien escurrida (preferiblemente piña natural)
  • 1/2 taza (120 ml) de suero de leche (buttermilk)

Para el glaseado

  • 1/2 taza (115 g) de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
  • 4 tazas (500 g) de azúcar glas (impalpable) tamizada
  • 1/4 taza (55 g) de piña triturada, bien escurrida
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 1/4 taza (25 g) de coco rallado (opcional, para espolvorear)

Preparación — Paso a paso

1. Preparar el horno y el molde

Precalienta el horno a 180 °C (350 °F). Engrasa un molde redondo de 22–24 cm y fórralo con papel vegetal, o usa spray desmoldante.

2. Mezclar los ingredientes secos

En un bol grande, tamiza la harina con el bicarbonato y la sal. Reserva.

3. Batir mantequilla y azúcar

En otro bol, bate la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla suave y cremosa (2–3 minutos con batidora eléctrica). Añade los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición. Incorpora la vainilla.

4. Unir ingredientes húmedos y secos

Agrega a la mezcla la mitad de los ingredientes secos, mezcla a velocidad baja, añade el buttermilk, luego incorpora el resto de la harina. Mezcla solo hasta que esté integrado — evita batir en exceso. Finalmente, incorpora la piña triturada y bien escurrida con movimientos envolventes.

5. Hornear

Vierte la masa en el molde preparado y alisa la superficie. Hornea durante 30–40 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro salga limpio o con migas húmedas. El tiempo exacto depende del horno y del molde; vigila a partir de los 28 minutos.

6. Enfriar

Deja enfriar el pastel en el molde 10–15 minutos sobre una rejilla. Luego desmolda y deja enfriar completamente antes de glasear (si el pastel está muy caliente el glaseado puede derretirse demasiado).

7. Preparar el glaseado

Bate la mantequilla hasta que esté cremosa. Añade gradualmente el azúcar glas tamizada, alternando con la piña triturada (escurrida) y la vainilla. Ajusta la consistencia: si está muy espeso agrega 1–2 cucharaditas de leche; si está muy líquido, añade más azúcar glas. Extiende sobre el pastel frío y espolvorea coco rallado si lo deseas.


Consejos prácticos

  • Escurre bien la piña: el exceso de líquido puede alterar la textura de la masa y del glaseado. Puedes presionar la piña triturada en un colador forrado con gasa.
  • Buttermilk casero: si no tienes suero de leche, mezcla 1/2 taza de leche con 1/2 cucharada de zumo de limón o vinagre y deja reposar 5 minutos.
  • Toque extra: dorar rodajas de piña en una sartén con un poco de mantequilla y azúcar y colocarlas sobre el pastel para decoración y un sabor caramelizado.
  • Versiones: añade 1/2 taza de nueces picadas o 1/2 taza de coco en la masa para textura.

Conservación

  • A temperatura ambiente y cubierto: 2 días.
  • Refrigerado (en recipiente hermético): 4–5 días. Saca el pastel 30 minutos antes de servir para que recupere suavidad.
  • Se puede congelar por porciones hasta 3 meses; descongela en la nevera y lleva a temperatura ambiente antes de servir.

Sugerencias de servicio

  • Acompaña con una cucharada de crema batida o helado de vainilla.
  • Para una merienda tropical, sirve con té frío o una limonada fresca.
  • Si lo quieres más festivo, decora con hojas de menta y rodajas finas de piña caramelizada.

Preguntas frecuentes rápidas

¿Puedo usar piña enlatada? Sí, pero escúrrela muy bien para evitar exceso de humedad.
¿Se puede hacer en molde rectangular? Sí, ajusta el tiempo de horneado (puede requerir unos minutos más).
¿Puedo sustituir la mantequilla por aceite? Sí, pero el sabor y la textura cambiarán (usa aceite vegetal y reduce ligeramente la cantidad).


¿Listo para probarlo? Este pastel de piña es una apuesta segura: fácil, sabroso y con ese aire tropical que siempre triunfa. Si quieres, te preparo la versión con trozos de piña caramelizados o una variante sin lactosa — dime cuál prefieres y la adapto. ¡A hornear! 🍍

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